Pido de todo corazón que siempre seas una mujer de bien, y que en todo momento confíes, pues Dios tiene los mejores planes para tu vida. ¡Feliz cumpleaños!
Muchas veces no nos damos cuenta de que hasta el más insignificante detalle es una gran bendición de Dios para ti. ¡Felicidades, sobrina! ¡Que sean muchos más!
Mi queridísima sobrina, una vez más llega este día tan esperado por ti y por mí. ¡Feliz cumpleaños! Pido a Dios que en los próximos esté ahí para verte.
Es increíble que ya estemos celebrando una vez más el cumple de una de mis personas favoritas en la Tierra. Desde que eras muy pequeñita me encanta compartir tiempo contigo. Eres una niña demasiado divertida, inteligente e inigualable con la que he vivido y espero seguir viviendo millones de aventuras divertidas.
Te quiero con todo mi corazón y lo único que le pido a Dios es que te bendiga y te regale una vida próspera en salud y amor. ¡Feliz cumpleaños, compañera de aventuras! Ya podemos ir planificando todo lo que haremos en este nuevo año, pues te prometo que mientras yo esté presente la frase “estoy aburrida” nunca estará en tu diccionario.